miércoles, 31 de octubre de 2012

CDA. Word casa T+G2


Después de haber realizado los dibujos en perspectiva axonométrica y cónica de la casa T+G2 del arquitecto Josep Llobet en la asignatura de geometría, hemos seguido trabajando con esta misma construcción en Herramientas Digitales realizando un documento Word sobre ella, ya que hace varias semanas nos explicaron las funciones más útiles para este tipo de documento.


La actividad consistía en buscar información sobre el arquitecto Josep Llobet y su obra la casa T+G2. Dicha información la hemos obtenido de diferentes páginas o blogs de internet, e incluso de una pagina propia del arquitecto. El documento Word debía contar con títulos e índices, numeración de páginas, encabezados, imágenes relacionadas y otros elementos propios de este programa.

Para realizarlo utilizamos Dropbox, pues nos facilita mucho el trabajo ya que no tenemos muchas ocasiones de poder reunirnos las tres integrantes del grupo y con este programa podemos poner en común lo que vamos haciendo. Buscar información, leerla detenidamente, redactarla, suprimir ciertas cosas, añadir otras, etc.


Esta actividad nos ha ayudado a conocer más aspectos de la casa T+G2 en la que llevamos trabajando unas semanas. También ha hecho que nos familiarizáramos más aun con el Word y además hemos aprendido a utilizar Dropbox, el que seguro, a partir de ahora, seguiremos utilizando con frecuencia.

martes, 30 de octubre de 2012

CDA. AutoCAD

El pasado Jueves 25 comenzamos a utilizar el programa AutoCAD en la asignatura de Herramientas Digitales.
Este programa es fundamental para la carrera que estamos estudiando, y hemos empezado por las cosas más básicas...
Ya tenía una idea de como se utilizaba pero seguro que ahora trataré con mas profundidad todos esos conceptos hasta lograr manejar este programa con facilidad.



lunes, 22 de octubre de 2012

Cancha Roja. Teruel

El ovni que aterrizó en Teruel. EL PAIS

En Teruel ha aterrizado un ovni. Lo más extraño es que brota del suelo. Es un espacio rojo y subterráneo desde el que se puede ver la calle: una cancha de triple altura de aires fabriles coronada por una plaza —de momento, dura— con varias antenas rodeadas de asientos. Tras sucesivos y tímidos intentos por alcanzar el siglo XXI con los proyectos minimalistas que ordenaron el paseo del Óvalo y la plaza del Torico, Teruel ha inyectado rotundidad y vida al corazón de su casco histórico. Contundente y de uso tan amplio como indefinido, el nuevo centro social de la plaza de Domingo Gascón mete el siglo XXI en los cimientos de la ciudad.
Así, de la antigua ciudad-museo emerge ahora un lugar para la gente. Sin embargo, frente a las llamativas arquitecturas de los últimos años, que buscaron revitalizar los corazones de tantos cascos viejos, este nuevo centro social es radical, pero oculto. Se asoma entre las viviendas que rodeaban al viejo mercado de esta plaza al este de la ciudad, pero sorprende con un aire de celebración que supera las intervenciones funcionales de ascensores o peatonalizaciones realizadas hasta ahora en Teruel.
Vistoso y rompedor, el espacio despierta pasiones entre los vecinos. A favor y en contra, naturalmente. Algunos ancianos rejuvenecen entre rampas coloreadas y lucernarios. Otros protestan ante un nuevo inquilino al que auguran relaciones hostiles con los aljibes medievales, las torres mudéjares y los edificios modernistas de la ciudad. Puede que se equivoquen. Con esta nueva intervención, Teruel gana tiempo. Le planta cara a la crisis y, sobre todo, añade un velo de modernidad a las sucesivas capas históricas que han ido construyendo el lugar. Una apuesta por agitar la vida en lugar de por momificarla. El peso inmovilizador de la tan bien salvaguardada urbe se ha aligerado en este rincón para pensar más en los ciudadanos que en las piedras.
A un paso de la estación de autobuses y junto a la ronda que recibe el acueducto, el nuevo centro dibuja una sorprendente entrada en la ciudad antigua. Su arquitectura monumental está construida con recursos básicos: más con espacios y colorido que con materiales y fachadas escultóricas. Por eso se inserta en una historia de espléndidas torres mudéjares y torreones enviando el mensaje contrario: no llega para ser contemplado, es un monumento para usar. Su desgaste medirá su éxito. Antes de inaugurarse ya ha hablado. Ha demostrado que la arquitectura contemporánea tiene más salidas que el debate entre el neomudéjar y la discreción.


Realizado por los estudios madrileños Mi5 y PKMN, el centro quiere llevar aire al pasado, proponer una lectura más dinámica y menos museizante de la ciudad. Busca ser un hito cívico, un monumento para los ciudadanos. Que triunfe o no dependerá de la imaginación del Consistorio. También del entusiasmo de los habitantes a la hora de gestionar este gran torpedo de contemporaneidad.


Es cierto que en Teruel desconfían de los arquitectos actuales. Y posiblemente no les falte razón. La hermosa y sutil iluminación que el estudio B70 sembró en la plaza del Torico costó dos millones de euros. Y tras estropearse una y otra vez, las lámparas están siendo sustituidas por tiras de basalto, el pavimento resistente que están acostumbrados a pisar los turolenses. También se rompió la piedra arenisca que el arquitecto David Chipperfield empleó para pavimentar el paseo del Óvalo, en el oeste de la ciudad antigua, y, de nuevo, han tenido que sustituirla por el basalto chino, que sí dura. Lo cuenta el ingeniero Vidal Villarroya, que, sin embargo, reconoce también la sobria belleza de la grieta de acero cortén que el arquitecto británico convirtió en acceso para los ascensores entre la escalera neomudéjar y la sede del Gobierno de Aragón. Esos elevadores tienen más tráfico que el transporte urbano. Son una escultura útil que, por cierto, no suele aparecer en las guías.
Villarroya estudió en Valencia y cuenta que al regresar a su ciudad se encontró con que muchas de las novedades —de la gastronomía (la trenza mudéjar) y de las celebraciones (la fiesta medieval que recrea la boda de Isabel Segura, la famosa amante de Teruel)— se empeñan en explotar la tradición. Para el arquitecto Nacho Martín, de Mi5, la arquitectura ofrece la oportunidad de respetar el pasado sin momificarlo, de hacer revivir la ciudad con ingenio. La cancha roja tiene toda la pinta de poder conseguirlo.

miércoles, 17 de octubre de 2012

H.D

Nuevas sensaciones, nuevas experiencias. Gente distinta, ciudad distinta. El comienzo de algo. De un sueño, de un reto, de una vida.
Comienzo de curso en el Grado de Arquitectura de la Universidad San Jorge de Zaragoza. Un inicio lleno de ilusión, motivación, entusiasmo y ganas.
En la asignatura de Herramientas Digitales nos han pedido que creáramos un blog donde tendremos la oportunidad de expresar todo aquello que aprendamos a lo largo de esta carrera, de redactar o exponer nuestros trabajos, de darnos a conocer,etc. Me parece una gran idea, un buen proyecto que hará que nos motive todavía más aquello por lo que vamos a luchar durante estos años.
No me ha resultado complicado crearlo, ya que desde hace unos años tengo uno propio que creamos una amiga y yo por pura curiosidad, pero el cual yo he seguido utilizando. He creado una cuenta diferente de gmail para no relacionarlos demasiado.
AQUI, comienzo a construir mi sueño.